¿Alguna vez te ha pasado que alguien te recuerda cómo eras en el pasado y no te lo recuerdan para bien? Bueno, ¡gracias a Dios que Jesús no es así! Él jamás nos echará en cara nuestro pasado, nuestros errores y fallas. Él te dice que ya todo lo viejo ha pasado y ha llegado lo nuevo, te ha hecho una criatura nueva. No importa qué digan las personas a tu alrededor, nadie te conoce como Dios, y si Él dice que eres una nueva criatura, ¡gloria a Dios! No importa qué hiciste o qué tipo de persona fuiste el año pasado, Dios hace todo nuevo. No tenemos por qué vivir cómo éramos antes; hoy podemos vivir en la fidelidad de su amor y su gracia.
Ejercicio:
Anota cosas que las personas hayan dicho de ti en el pasado y que de cierta manera te hayan marcado. Y date a la tarea de encontrar en la Biblia una promesa de Dios que anule eso; te garantizo que lo encontrarás. Por ejemplo, a mí me han dicho que soy miedosa, que todo me da miedo. Pero decidí que no voy a serlo más porque Dios no me diseñó para ser así, entonces mi versículo es: 2 Timoteo 1:7. Ahora haz tú lo mismo y habla sobre tu vida lo que Dios habla de ti.
Oración:
Padre, yo creo que tú me has hecho una nueva criatura en Jesús. Te pido que tú canceles con tu verdad todo lo que se ha dicho de mí en el pasado, que tu Espíritu Santo habite en mí y mi carácter sea como el de Cristo. Te doy gracias porque tú no me ves por lo que fui, sino por quien me has llamado a ser en Cristo. Amén.
Lectura:
Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva creación. ¡Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo!
2 Corintios 5:17